Convivencia, los elementos de la convivencia.

Convivencia. 

Es la acción de convivir (vivir en compañía de otro u otros). En su acepción más amplia, se trata de un concepto vinculado a la coexistencia pacífica y armoniosa de grupos humanos en un mismo espacio.

Los elementos de la convivencia.


La convivencia está compuesta por cuatro elementos: el conflicto, porque se debe aprender a convivir con él, pues siempre va a estar presente; la incertidumbre, porque todo está cambiando, en especial las personas con las que nos relacionamos cada día; el otro diferente, porque cada persona es un mundo del que conocemos apenas una parte; y la memoria colectiva, porque la mayoría de las cosas que se hacen en la vida cotidiana son el producto del conocimiento que ha desarrollado la sociedad desde tiempos pasados.

1. El conflicto.

La palabra conflicto significa "chocar entre sí", y expresa circunstancias negativas y desagradables, que por lo general están vinculadas con la violencia; que a su vez significa infringir los derechos e integridad de alguien. 

Los seres humanos tenemos la necesidad de relacionarnos entre sí para garantizar nuestra existencia (instinto gregario), desde este punto de vista es posible reconocer a los demás como facilitadores de la vida en comunidad. Sin embargo, las personas como seres diferentes y antagónicos están expuestas al conflicto por la diferencia de sus prioridades e intereses. 

Reconocer la complejidad de los seres humanos y evitar verlos como una amenaza, facilita el manejo de las situaciones de conflicto, permite la comprensión de la interacción humana y contribuye a generar los cambios que la sociedad requiere.

2. La incertidumbre.

El mundo donde vivimos, ofrece la apariencia de orden y certidumbre permanente, de tal forma que parece que nada cambiará. Sin embargo, la vida social está en permanente dinámica y sujeta a cambios. En esta dinámica cualquier elemento que signifique transformación, causa inseguridad o incertidumbre. Desde tal óptica, las instituciones como la escuela y los medios de comunicación, tienen la responsabilidad de construir formas de convivencia flexibles, que analicen las bondades de lo nuevo y estén dispuestas a abrirles su propio espacio. 

Un ejemplo del temor a lo nuevo lo constituyen las prácticas de la juventud de todos los tiempos, en cuanto a su vocabulario, manera de vestir y gustos musicales, que al parecer han estado en contravía y han sido rechazados por su anterior generación, por el temor a la ruptura de preceptos, consideraciones y valores, en apariencia muy sólidas y dignas de preservar. 

Alrededor de 1960, surgió en el mundo occidental, un nuevo género musical, conocido como rock. A sus seguidores se les asoció con el consumo de droga y las prácticas de convivencia poco convencionales. Muchas personas adultas de aquellos años rechazaron y se opusieron a esta forma de expresión de la cultura, sin embargo, el rock se mantuvo y se abrió espacio en diferentes sociedades, al punto que en la actualidad es un elemento que ha servido para construir convivencia. En algunas ciudades de Colombia y del mundo, se realizan conciertos y festivales de rock y de otros géneros musicales más recientes, lo cual demuestra que la sociedad se transforma y, por consiguiente, la incertidumbre es inherente a la condición humana. 

3. El otro diferente. 

Cada persona es diferente, piensa y actúa distinto y forma parte de un grupo cultural con tradiciones y costumbres particulares. Sin embargo, esta pluralidad puede convertirse en una amenaza permanente para la convivencia, cuando se piensa que lo ideal es uniformar a las personas en su pensamiento y actitudes. Reconocer a los demás seres humanos como diferentes, es comprender su integridad y aceptar la diversidad de la sociedad de la cual se forma parte. 

4. La memoria colectiva.

La memoria colectiva es la información que tiene cada persona, acerca de la cultura y de la manera cómo funciona la sociedad a la que pertenece. 

Esta información orienta la cultura del grupo social, define las pautas de con vivencia y determina las formas de preservación o de adaptación frente a nuevas situaciones. Por eso, cuando en la memoria colectiva de una sociedad está definida una determinada práctica de convivencia, lo más probable es que esta se perpetúe al transmitirse de generación en generación.

Definición de Solidaridad.


Se conoce con el término de solidaridad a aquel sentimiento o también considerado por muchos un valor, a través del cual las personas se sienten y reconocen unidas y compartiendo las mismas obligaciones, intereses e ideales y conformando además uno de los pilares fundamentales sobre los que se asienta la ética moderna. 

A instancias de la Sociología, el término solidaridad goza de una especial participación en dicho contexto, siendo, como dijimos, un sentimiento que supone la unidad de los lazos sociales que unirán a los miembros de una determinada sociedad. 

La solidaridad es uno de los valores humanos por excelencia, del que se espera cuando un otro significativo requiere de nuestros buenos sentimientos para salir adelante. En estos términos, la solidaridad se define como la colaboración mutua en la personas, como aquel sentimiento que mantiene a las personas unidas en todo momento, sobre todo cuando se vivencia experiencias difíciles de las que no resulta fácil salir.

Diferencias individuales.


El concepto de diferencias individuales está asociado a los conceptos de personalidad, inteligencia, cognición, motivación, estilos de aprendizaje y otros términos de psicología. 

Las diferencias individuales son el conjunto de características o rasgos que diferencian a una persona de las demás Cada uno de nosotros es diferente, ya que el psiquismo de cada uno, se procesa y elabora de distinta forma de acuerdo a algunos factores. Existen unas causas innatas, que vienen determinadas por nuestra naturaleza y nuestra realidad genética, que conforman, en cierta medida, lo que llamamos el carácter, el temperamento, la personalidad de cada individuo.

Respeto.

El respeto es uno de los valores morales más importantes del ser humano, pues es fundamental para lograr una armoniosa interacción social. Una de las premisas más importantes sobre el respeto es que para ser respetado es necesario saber o aprender a respetar, a comprender al otro, a valorar sus intereses y necesidades. En este sentido, el respeto debe ser mutuo, y nacer de un sentimiento de reciprocidad.

Los elementos de la convivencia.